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jueves, 31 de julio de 2014

Valente Arellano a 30 años de su partida, por Patricio de la Fuente

Pasaje sobre la vida y muerte de Valente. 

Valente Arellano
Al acercarse el día 4 de agosto, en el que se conmemorará el 30 aniversario de la partida del gran matador de toros lagunero Valente Arellano Salum, continúan los recuerdos de su vida y obra, dentro y fuera del ruedo. Hoy, en el diario lagunero "El Siglo de Torreón", el columnista Patricio de la Fuente González-Karg. Sus memorias del ídolo lagunero, así como una entrevista a su señora madre, Sonia Salum.




Valente Arellano a 30 años de su partida

La muerte las unió, así se hicieron amigas, a través del dolor compartido. La peor, la más cruel e incomprensible de todas las muertes, la de un hijo. Ambas enterraron a uno y en ese instante dejaron pedazos de sí allá arriba, en el cielo, porque al verlos morir ellas también murieron en vida. Algo de luz se les extravió para siempre.
Así conocí antes de hacerlo en persona a Sonia Salum, hoy casada con Felipe Garrido. La conocí a través de mi abuela y lo que me platicaba de ella, de las alegrías y dolores que juntas compartían, de sus hijos: los vivos y los muertos.
"Vieras a Sonia, tan guapa, con tal garbo, salerosa, artista en toda la extensión de la palabra, ha puesto a Torreón y a México en el mapa cultural; es toda ella, fantástica", decía, y yo imaginaba a Sonia genial porque para serles sincero, mi abuela se refiere así, con tal admiración, a muy pocas personas. No hay en sus afectos más profundos, hipérbole ni medianía.
Antes de conocer a Sonia la quise; cuando la conocí la quise mucho más y cuando la entrevisté, hace casi diez años, la terminé comprendiendo y compartí un poquito de su dolor. Nunca en una entrevista, me había yo quebrado hasta que escuché a Sonia hablar de su hijo, el irrepetible Valente Arellano, y del luto que la persigue cada día de su vida, y que le roba el aire.
El próximo 4 de agosto se cumplirán 30 años de la muerte de su hijo, quien se perfilaba para ser una de las más grandes figuras del toreo todos los tiempos -el octavo "mandón" según opinan los expertos en materia taurina- y que por ironías del destino, no murió en una plaza de toros sino en un accidente cuando a gran velocidad conducía su motocicleta por las calles de Torreón.
El pasado domingo en la Casa Coahuila en el Distrito Federal, tuvimos la oportunidad de acompañar a sus padres Sonia Salum y Valente Arellano, a su hermana Salma y a Felipe Garrido, en un sentido homenaje de los muchos que se le harán al diestro. No narraré lo ahí transcurrido, pero sí el impacto que me causaron las imágenes que se proyectaron.
Pude observar a un Valente Arellano en plenitud, que desbordaba alegría y sus expectativas, sueños y añoranzas de un gran futuro por delante; un futuro que se truncó de tajo, de golpe, a rajatabla. Porque nos guste o no la tauromaquia, Valente antes que torero fue un ser al que le robaron la vida demasiado pronto.
Al Valente Arellano al que se homenajeó el domingo, no sólo pudimos verlo lidiar toros de forma magistral en la película que se proyectó, sino entrevistado por Jacobo Zabludovsky y otros grandes comunicadores de la época. Qué encanto el de Valente, qué simpatía, naturalidad, don de gentes; lo percibí liviano, me acordé de la estridencia y lo irreverente que yo mismo fui a esa edad, antes de cumplir los veinte años.
Vi a un chavo que sabía ser y estar; entendí que sacó mucho de su madre, de Sonia. Porque con Sonia te sientes cómodo, y puedes ser y estar y de ese tipo de personas, a medida que crezco, me gusta rodearme. Valente debe haber sido fantástico…
Hacia 2005, cuando entrevisté a Sonia Salum, no sabía cómo abordar el tema de la muerte de su hijo. Hoy pretendo, con el cariño y respeto que me une a esa familia, dejarte querido lector, lo que me contestó Sonia en aquel lejano 2005 y que a 30 años de la muerte de Valente, cobra un significado especial. Va, con toda la fuerza de una madre que supo afrontar el peor de los escenarios y de las circunstancias, y que a pesar de todo sigue brillando y destella tal como me la describió mi abuela, siendo yo un niño.
"¿Usted presintió la partida de Valente?
Sí, pero lo presentí esa noche. Nunca le he dicho esto a nadie, Patricio, pero yo tuve un golpe de horror el día que llegué a la casa y vi la motocicleta recién comprada. Valente a los dieciocho años era un muchacho millonario que ya lo habían cornado siete u ocho veces; era un muchacho que ya tenía las riendas de su vida en sus manos y por ello yo no le podía decir "no te subas a la moto" cuando cada fin de semana estaban a punto de matarlo en la plaza de toros.
Después del primer accidente de motocicleta traía un collarín y estaba acostado en el suelo, muy serio, cuando pasé y le pregunté ¿Qué tienes Valente? Y esto fue lo que me dijo, refiriéndose a la gente de la plaza: ya no sé qué darles mamá, quieren todo, quieren que yo me muera. Yo digo que esta presión le costó la vida. Un cantante tiene éxito con su voz, pero Valente tuvo éxito con su vida.
Me encanta recordar a mi hijo. ¿Sabes algo Patricio? Te quiero mucho y te respondo con mucha fuerza, como si lo estuviera viviendo otra vez.
Sigo pues tengo una hija y una nieta. Aunque las tengo lejos sé que son muy pacientes. En fin, esa vida me tocó y hago lo mejor que puedo."
Nos leemos en Twitter, sin lugar a dudas: @patoloquasto
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miércoles, 30 de julio de 2014

Anécdotas valentianas, por Heriberto Murrieta

Recordando al gran torero lagunero.

Valente Arellano
El próximo lunes se cumplirán treinta años de la trágica muerte del matador de toros lagunero Valente Arellano Salum, quien se estaba encumbrando como matador de toros tras una exitosísima carrera como novillero, en la que llenaba todas las plazas en las que se presentaba.
Con motivo de dicho acontecimiento, Heriberto Murrieta escribe algunas memorias alusivas en su columna semanal del diario "Récord".



Anécdotas valentianas

El próximo lunes se cumplirán 30 años del fallecimiento de Valente Arellano. Si viviera, el carismático torero de Torreón estaría a punto de cumplir los 50 años de edad, pues nació el domingo 30 de agosto de 1964. ¿En qué se hubiera convertido?, ¿en una figura dominante?, ¿en el gran ídolo del público mexicano?, ¿en el octavo mandón de la historia del toreo, como asegura Guillermo H. Cantú?
Monumento a Valente Arellano. Plaza de Toros Torreón
Durante el emotivo homenaje póstumo que se realizó el domingo pasado en la Casa de Coahuila de Coyoacán, Ernesto Belmont, contemporáneo del diestro lagunero, contó que cierto matador le dijo alguna vez en una ganadería: "Qué fácil, a ti te tocó la época de Valente". Se refería a que el auge e impacto valentistas habían representado un escaparate inmejorable para destacar. Pero Belmont respondió, haciendo alusión a la proverbial raza del torero, siempre incómodo para sus alternantes: "Mira maestro, yo siempre sudaba el terno, ¡pero con Valente lo sudaba doblemente!".
Para cerrar la ceremonia con broche de oro, Fernando Arroy platicó una historia que sirve para delinear el perfil humano del ídolo malogrado. Después de mucho tiempo de esperar la oportunidad de torear en una ganadería en la cual hacía distintas labores, el ganadero lo relegó para darle turno a Valente. Cuando Fernando rumiaba su mala suerte y se resignaba a no torear, terció Arellano: "¡Ganadero, si Fernando no torea, yo tampoco, y me voy de aquí en este momento!". Finalmente torearon los dos. Un gesto de gran calidad humana del diestro de la Comarca Lagunera.
La última novillada que llenó la México
De llamar la atención la historia de Alejandro Silveti. Habiendo sido nieto, hijo y hermano de matadores de toros, no fue sino hasta que vio torear a Valente en la Monumental de Morelia que se decidió a hacerse torero. La fecha, el 2 de enero de 1983. Alejandro reconoce en Valente a su gran inspirador.
Una más, para rematar. En alguna ocasión, Valente Arellano padre fue a recibir un reconocimiento y aunque lo aceptó agradecido, no pudo evitar una cordial advertencia: "No sé qué hice para merecer esta distinción". En ese momento, desde el fondo del salón se escuchó la voz atronadora de Ignacio García Villaseñor con la respuesta: "Yo sí sé: ¡un hijo!".

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http://www.record.com.mx/opiniones/noticias/1922089/opinion+columnistas/petardo-en-monterrey

miércoles, 23 de julio de 2014

Circos y corridas, por Heriberto Murrieta

Una mirada a lo que sucede en los circos y en las ganaderías de Bravo.

A propósito del sainete que se ha orquestado en la capital de nuestro México, y que ha sido replicada en otras entidades del territorio nacional, comparto la columna de Heriberto Murrieta publicada hoy en el diario "Récord".

Circos y corridas

Heriberto Murrieta
El trato que los seres humanos dan a los animales, los describe en gran medida. Aquella persona que se divierte maltratando, burlándose, sometiendo o mutilando a un animal, no es más que un ignorante o un cobarde que cree que su condición racional superior le da licencia para ensañarse con ellos. Tiene tanta dignidad la hormiga indefensa como el león. No se pierdan la película 'Una Aventura Extraordinaria' para atestiguar una relación de temor, que luego se mezcla con respeto y hasta amor entre un ser humano y un tigre que conviven tras un naufragio.
En días pasados, fue aprobada la ley que prohíbe los animales en los circos del Distrito Federal. Para documentarnos y tener más argumentos para formarnos una opinión sobre este delicado tema, conviene leer la columna 'Jaque Mate' de Sergio Sarmiento, publicada el 11 de junio pasado en el periódico Reforma, y el reportaje que el domingo antepasado publicó ese mismo diario dentro del suplemento 'Forma y Fondo'.
Sarmiento sostiene que los animales de circo suelen estar bien alimentados y gozan de servicio veterinario y amor. Revela que quienes han trabajado en circos le han comentado que los diputados no saben cómo se adiestra a los animales. Sentencia que la campaña del Partido Verde fue simplemente ignorante y no consideró la situación real de los animales en los circos. También señala que los diputados no se atreven a intervenir en la crueldad hacia los animales en los hogares porque perderían demasiados votos. Esto no es más que la clásica politización de ciertos aspectos de la vida nacional.
El reportaje de 'Forma y Fondo' muestra el otro lado de la moneda. Cuenta la historia de cinco animales: un oso americano, un mono araña, una tigresa, una boa y una leona africana, que fueron rescatados de distintos circos mexicanos y que se recuperan en el Bioparque Convivencia de Pachuca. Tras ser presentadas diversas denuncias ciudadanas, estos cinco animales fueron asegurados por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente. En efecto, habían sufrido maltrato, heridas, fisuras, descalcificación, amputaciones, quemaduras y desnutrición.
La leona 'Morelia', que llegó a pesar escasamente 35 kilos, ahora da en la báscula 140, ya ruge de nuevo y será reubicada en el santuario de carnívoros más grande del mundo, localizado en Denver, Colorado.
A reserva de conocer más información sobre el trato que se da a los animales en los circos, el asunto sirve para reafirmar que en la tauromaquia se le brindan cuidados especiales al toro de lidia durante todo su desarrollo. Se le dispensa dignidad.
Ambiente en el que vive el toro de lidia
Los ganaderos, toreros, empresarios, periodistas y aficionados sentimos por el toro una especie de veneración. Se le alimenta durante cuatro años dentro de esos grandes ecosistemas que son las ganaderías y el criador se esmera en su protección. Busca que llegue a la plaza en excelentes condiciones, porque de su comportamiento en el ruedo depende la conservación y el aumento de su prestigio.
Son absolutamente falsos los argumentos que esgrimen los antitaurinos sobre un supuesto maltrato a los toros antes de ser lidiados. Si esas acusaciones fueran ciertas, éstos saldrían al ruedo ciegos, descoordinados, débiles e inválidos. Saltan al ruedo cegados, más no ciegos; cegados por su instinto de ataque, por su casta y su bravura.
Con excepción de pachangas pueblerinas que no pueden ser llamadas corridas, en las que en efecto los participantes se burlan, azuzan y golpean animales de media casta, faltándoles al respeto y poniendo así en entredicho su calidad humana, el trato que recibe el animal en los festejos formales es de máximo respeto, no obstante que se le hiere y se le mata dentro de un antiquísimo ritual que fomenta grandes valores humanos.
En el toreo no cabe el maltrato al toro y si bien es cierto que hay sangre y muerte, no hay crueldad puesto que a ningún torero le causa placer que el toro sangre y muera.
En el circo, algunos animales son utilizados para provocar el aplauso y la diversión a través del reforzamiento positivo, que consiste en entregarles premios por conductas adecuadas. En el toreo eso no es posible.
Sin dejar de considerar que los artistas del circo pueden correr riesgos, los animales con los que realizan su espectáculo están amaestrados. Al toro no se le puede amaestrar para que haga lo que el ser humano le pide. Se le tiene que dominar a través de otros procedimientos. En fin, la polémica sobre los animales en los circos da pie a reforzar la postura sobre el trato digno que recibe el toro de lidia.

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domingo, 13 de julio de 2014

Brasil: el fin de una bella época.

Réquiem por la magia verdeamarelha.

De niños, a principios de la década de los años ochentas, jugábamos a ser Brasil, peleábamos por llamarnos Brasil en aquellas picas callejeras; nos creíamos brasileños cuando teníamos el balón en los pies, lo hacíamos que corriera alegremente, buscábamos dar el toque lo más estético posible, buscando emular a los virtuosos que veíamos en la televisión; en nuestras cáscaras callejeras, nuestros sobrenombres -los ahora denominados "nicknames"- terminaban en "inho", y éramos una hermandad, ya que todos nos apellidábamos "do Nascimento"; y todo por la admiración que nos causaban aquellos portadores de la mítica casaca verdeamarelha; nos dejó marcados de por vida. 

Pero, al parecer, esa magia se ha extinguido. Los niños de hoy en día, viendo ese remedo de Scratch du Oro, esa parodia de selección brasileña que osó jugar el Mundial 2014, no sentirán nada; vieron una selección brasileña que les despertará la misma admiración que cualquier escuadra de medio pelo.


Monstruos como Pelé, Rivelino, Zico, Sócrates, Dirceu, Junior, Toninho Cerezo, Falcao, Juninho, Cafú, Rivaldo, Romario, Bebeto, Ronaldo, Ronaldinho, Kakâ y demás brasileños capaces de crear bellísimas fantasías sobre el rectángulo verde, parecen ser parte de una extinta estirpe, que ha sido engullida por ese nuevo orden mundial llamado fútbol utilitario.

Si tenemos algún compromiso con la estética, así como con los ecosistemas de nuestro planeta, debemos estar de luto hoy, que nos hemos dado cuenta de que se ha extinguido una especie, la de los magos del balón. El equilibrio del orbe se encuentra sumamente alterado.

Así como en Las Guerras de las Galaxias, el futbol mundial de golpe se ha dado cuenta de que se han extinguido los Jedi. Se siente un gran desorden en la Fuerza. Lo único que nos queda a quienes amamos el futbol espectáculo, es mantener viva la esperanza de que por ahí haya quedado algún Yoda oculto en la selva del Amazonas, y que pronto haga resurgir a esa portentosa pléyade, para bien de ese juego tan hermoso llamado futbol.